Con solo cuatro años en el mercado, Swift se ha convertido en un lenguaje
de programación de alto nivel utilizado para desarrollar aplicaciones iOS.
El desarrollo de aplicaciones con Swift hace que las aplicaciones sean mejores y más rápidas debido a las bibliotecas dinámicas que utilizan para el almacenamiento. Esto se traduce en una mejor participación del usuario, ya que las aplicaciones empresariales tienden a estar cargadas con información que ralentiza su rendimiento.
Las empresas que han optado por trabajar con Swift han alcanzado una transformación digital al colocarse en el mercado de aplicaciones. Esto da como resultado aplicaciones exitosas.
Swift permite a los desarrolladores producir aplicaciones altamente interactivas y fáciles de usar de una manera ágil porque pone en juego elementos funcionales y lógicos que reducen el tiempo de desarrollo de una aplicación móvil.
Swift deja poco margen de error. Sus construcciones de lenguaje excluyen varios errores que podrían conducir al mal desempeño y al fracaso de la aplicación. En el mundo actual, donde el mercado de aplicaciones es muy competitivo, las aplicaciones deben pasar por diferentes capas de control de calidad y Swift proporciona precisamente eso.