La inteligencia artificial es definitivamente la tecnología del momento, sus usos van desde un simple filtro de redes sociales donde se cambia la voz o imagen de una persona, hasta integrarse en flujos de trabajo tan importantes como el control de la calidad.
El control de calidad es un proceso vital para un proyecto y que necesita de una adecuada atención al detalle, lo cual puede causar errores cuando es hecho por un humano, por lo que se comenzaron a implementar tecnologías de inteligencia artificial para fortalecer este flujo y reducir al mínimo posible la lista de errores al momento de revisar un componente de un producto de software por ejemplo.
En un proyecto de software se realizan varios pasos para que pueda terminar de manera exitosa, uno de los más importantes es el de control de la calidad, o QA por sus siglas en inglés, ya que la persona o el equipo encargado de esto tiene la tarea de verificar todos los componentes y que cada uno funcione como debe de hacerlo.
Este trabajo puede hacerse de manera manual o automatizado, utilizando varias herramientas disponibles en el mercado para ello. Uno de los más recientes procesos de control de calidad es el que integra inteligencia artificial en su flujo de trabajo.
Hay herramientas impulsadas con inteligencia artificial que son capaces de mejorar significativamente el proceso de trabajo del equipo encargado de verificar cada paso y cada componente creado en un proyecto de software.
Estas son las 5 áreas del control de calidad que se benefician de una herramienta de inteligencia artificial:
La IA puede automatizar tareas de prueba repetitivas, como las pruebas de regresión, liberando tiempo al evaluador para centrarse en escenarios más complejos. También funciona para automatizar las pruebas entre navegadores.
Al utilizar una herramienta impulsada con inteligencia artificial, se pueden generar y ejecutar casos de prueba que cubran una gama más amplia de escenarios, aumentando la cobertura de las pruebas y reduciendo la probabilidad de que se pasen por alto defectos.
Una de las tareas principales del proceso del control de calidad es verificar que el código y el producto de software en general no tenga defectos. La inteligencia artificial puede analizar grandes cantidades de datos para identificar patrones y anomalías que podrían pasar desapercibidas para los evaluadores humanos.
Adelantarse a los acontecimientos es de gran ayuda para el equipo de control de calidad, y esto es algo que pueden lograr con la inteligencia artificial. Utilizando una herramienta impulsada por esta tecnología, pueden analizar datos históricos para predecir posibles defectos o áreas de riesgo, lo que permite a los evaluadores centrarse en esas áreas.
La inteligencia artificial puede analizar los resultados de las pruebas e identificar áreas donde las pruebas pueden simplificarse u optimizarse, reduciendo el costo y el tiempo necesarios para las pruebas.
En general, la IA puede ayudar a mejorar el control de calidad al reducir el tiempo y el costo de las pruebas, aumentar la cobertura y la eficiencia de las pruebas y mejorar la precisión y eficacia de la detección y prevención de defectos.
Existen numerosas industrias que están empezando a utilizar la inteligencia artificial (IA) por diversas razones. Estos son algunos de los usos más comunes de la IA en las industrias actuales:
La inteligencia artificial continúa ganando terreno entre las tecnologías de preferencia por las empresas a nivel mundial. Rootstack ha trabajado con ella en varios proyectos y puede ayudarle a llevar la idea que tiene en mente a la realidad.