En el desarrollo de software, el Solution Discovery es fundamental para definir y validar los requisitos del proyecto antes de comenzar su implementación. Este proceso permite reducir riesgos, mejorar la alineación entre los equipos y asegurar que el producto final cumpla con las expectativas del cliente. Aquí te presentamos una guía paso a paso para realizar un Solution Discovery efectivo.
El Solution Discovery es una fase inicial en el ciclo de desarrollo que busca entender profundamente los problemas o necesidades del cliente y diseñar una solución efectiva. Durante este proceso, se identifica el alcance del proyecto, se define la solución propuesta y se anticipan posibles desafíos o riesgos.
Esta fase es clave para ahorrar tiempo y recursos a largo plazo, ya que evita la necesidad de realizar cambios importantes en etapas avanzadas del proyecto.
Antes de iniciar, asegúrate de que tienes los siguientes elementos en orden:
Equipo adecuado: El equipo de Solution Discovery debe incluir a un líder de proyecto, analistas de negocios, diseñadores de experiencia de usuario (UX), desarrolladores y, en algunos casos, stakeholders clave del cliente.
Objetivos claros: Establece metas y expectativas específicas para el proceso. ¿Qué información es crucial obtener? ¿Cuáles son los puntos críticos que deben resolverse?
Documentación inicial: Revisa cualquier documentación proporcionada por el cliente, como requisitos preliminares, especificaciones del proyecto y resultados esperados.
Esta es la primera fase práctica de Solution Discovery, y se centra en comprender profundamente el contexto y las necesidades del cliente.
Habla directamente con los stakeholders clave para conocer sus expectativas y preocupaciones. Es importante entrevistar a una variedad de personas, desde directores hasta usuarios finales, para tener una visión completa del problema.
Consejos:
Prepárate con preguntas claras para identificar las prioridades y los desafíos específicos.
Escucha activamente y toma nota de los puntos clave.
Revisa qué soluciones existen actualmente en el mercado y cómo otras compañías han abordado problemas similares. Este análisis te permitirá identificar oportunidades para diferenciarte y destacar en el mercado.
Si el cliente ya tiene usuarios o clientes, aprovecha esa información. Realiza entrevistas o encuestas a usuarios actuales para entender sus frustraciones, preferencias y necesidades. Los datos de usuarios proporcionan una visión invaluable sobre cómo debe diseñarse la solución.
Una vez recopilada la información, el siguiente paso es definir con claridad el problema que se debe resolver y los objetivos del proyecto. Este es un paso crítico que sentará las bases para todas las fases futuras.
Define el problema central en términos claros y concisos. Por ejemplo: "Los clientes tienen dificultades para rastrear sus pedidos en tiempo real".
Cada objetivo debe estar alineado con la solución propuesta y ser medible. Por ejemplo: "Reducir el tiempo de búsqueda de información de pedidos en un 50%."
Consejo: Utiliza un formato SMART (Específico, Medible, Alcanzable, Relevante y con un Tiempo definido) para asegurar que los objetivos sean claros y alcanzables.
En esta etapa, se proponen soluciones que podrían resolver el problema definido y se validan con los stakeholders.
Organiza sesiones de brainstorming con tu equipo para generar ideas. No te limites en esta fase: lo ideal es proponer diversas alternativas, incluso aquellas que podrían parecer poco convencionales.
Evalúa cada solución en función de su viabilidad, impacto en el negocio y alineación con los objetivos establecidos. Puedes utilizar métodos como el análisis costo-beneficio o una matriz de priorización para comparar opciones.
Presenta la solución seleccionada a los stakeholders clave para recibir su retroalimentación. Asegúrate de que comprendan la solución y la aprueben antes de avanzar. Esta validación garantiza que todos estén alineados y permite realizar ajustes antes de la fase de diseño.
Ahora que tienes una solución aprobada, el siguiente paso es definir el alcance específico del proyecto y sus requisitos técnicos. Esto incluye todos los detalles que guiarán la implementación.
Describe todas las funcionalidades que el software debe incluir para cumplir con los objetivos. Estos requisitos pueden incluir características específicas, capacidades de rendimiento, integración con otros sistemas, etc.
Las historias de usuario ayudan a visualizar cómo interactuarán los usuarios finales con el sistema. Cada historia debe describir una funcionalidad desde la perspectiva del usuario, lo cual facilita entender cómo debe funcionar la solución desde un enfoque práctico.
Define los elementos clave de la arquitectura técnica: bases de datos, lenguajes de programación, plataformas de despliegue, etc. Esta definición técnica asegura que el equipo de desarrollo comprenda los requisitos específicos del proyecto.
El último paso de Solution Discovery implica la creación de prototipos y pruebas para visualizar y evaluar la solución antes de iniciar su desarrollo completo.
Usa herramientas de diseño para crear prototipos iniciales de la solución. Estos prototipos ayudan a validar el flujo de la experiencia del usuario y la estructura básica sin necesidad de un desarrollo avanzado.
Realiza pruebas de usuario para recopilar retroalimentación sobre el prototipo. Esto permitirá identificar y corregir problemas de usabilidad y mejorar la solución desde las primeras etapas.
Consejo: Documenta todas las observaciones de los usuarios para ajustar el diseño antes de iniciar la programación.
La documentación es esencial para asegurar que todo el equipo esté alineado en la fase de desarrollo. Esto incluye los hallazgos, las decisiones y los requisitos acordados durante el Solution Discovery.
Este documento debe incluir un resumen de todo el proceso: objetivos, problemas, soluciones, requisitos técnicos y resultados de las pruebas de usuario. Será la base de referencia durante el desarrollo.
Finalmente, desarrolla un roadmap o cronograma para el proyecto, con fases y fechas específicas. Este cronograma debe incluir hitos clave y fases de desarrollo, pruebas e implementación, asegurando que todo el equipo esté alineado con los tiempos estimados.
Llevar a cabo un proceso de Solution Discovery bien estructurado permite identificar con precisión los problemas y necesidades del cliente, proponiendo soluciones efectivas y bien fundamentadas antes de la etapa de desarrollo. Este enfoque no solo ahorra tiempo y dinero, sino que también garantiza una mejor experiencia para el cliente, ya que minimiza la probabilidad de cambios importantes durante las etapas avanzadas del proyecto.